La celebración de los 15 años varía mucho según los distintos países. Se comenzó a imitar la costumbre europea de una presentación en sociedad a los quince años, rodeada de un hálito de nobleza, entre valses importados de Viena.
En Uruguay y Latinoamérica las niñas tienen la ilusión de que tendrán su gran ceremonia cuando lleguen a ser quinceañeras. La celebración de los quince años marca la transición de niña a mujer y es un modo de reconocer socialmente que la chica en cuestión ha alcanzado la madurez.
Existen distintos tipos de tradiciones y rituales de presentación de la quinceañera para el momento de la celebración.
Un cortejo muy emotivo es el formado por una niña mucho más joven que la homenajeada, que lleva una almohadilla en forma de corazón con una coronita y un niño que porta en otra almohadilla una réplica de zapatos de tacón. El momento cumbre de la celebración tiene lugar cuando la quinceañera se cambia de zapatos y luce la corona.
El padre, si está presente, es quien le quita sus zapatos de tacón bajo y le pone los de taco alto y es la madre quien le coloca la corona. La niña que entró con calzado de infancia sigue su camino como mujer joven.
Otras tradiciones dentro de esta celebración incluyen el tirar una muñeca. La muñeca significa la última muñeca de la niñez de la joven, y usualmente es una Barbie o algo parecido. La joven tira la muñeca a las otras niñas invitadas así como se tira la liga en una boda.
La fiesta de quince años empieza con la llegada de la quinceañera, normalmente acompañada por el brazo de su padre, con una entrada especial por la puerta principal o baja unos escalones mientras una canción que escogió es escuchada de fondo y amigos o parientes masculinos le entregan flores.
Al pie de la escalera se encuentra con su papa y bailan el primer vals.
En Uruguay, una de las ceremonias más utilizadas y emotivas es el cortejo de las 15 velas y 15 rosas. La quinceañera baja unos escalones mientras tocan una canción que ella escogido. Al pie de la escalera la esperan 15 jóvenes con rosas o cualquier otro tipo de flor, mientras que 15 damas la esperan con velas. 15 parejas para representar cada año que cumple.
La quinceañera toma las flores y apaga las velas. Enseguida va hacia el área de baile para bailar el vals con su padre, padrino y/o abuelo.
Todas las tradiciones son hermosas, aquí lo más importante es escoger la que más te identifique, disfrutar y ser feliz junto a tu familia y amigos.