El champagne es un vino de origen francés que está presente en todo evento social o fiesta, aunque también se lo puede disfrutar en una comida o en un momento de relax.
Reconocemos un buen champagne principalmente a través de la vista, prestando atención a su color y a sus burbujas que deben ser finas y persistentes. Al beberlo, debemos sentir su equilibrada acidez, la fineza y la suavidad de sus burbujas. La mejor opción siempre será elegir un espumante de buena calidad, con la cantidad de azúcar que uno prefiera, en función del momento en el que se va a servir o de la ocasión que se quiera celebrar.
Los champanes se clasifican según el grado de azúcar que poseen.
El Extra Brut es el más seco de todos y es ideal para beber como aperitivo y brindis en general; el Brut tiene unos pocos gramos de azúcar y sirve para acompañar una comida de principio a fin; el Demi Sec es dulce y puede acompañar a los postres y helados.
En la recepción de una fiesta, la bebida es uno de los aspectos más importantes pues junto con la comida servirá para consentir a sus invitados.
En Uruguay existen una gran variedad de bodegas, vinos y licores de excelente calidad que varían en precio y calidad.
Una buena organización requiere de un cálculo apropiado de las cantidades, tanto de comida como de bebida. Por supuesto que todo depende de la cantidad de miembros, el clima, la cantidad de mujeres y varones, el tipo de tragos.
Al momento de hacer el cálculo considera que el rendimiento por botella de 750 ml. de destilados (ron, whisky, vodka, etc.) es de 18 tragos; de digestivos de 12 tragos y de Champagne o vinos de 8 tragos.
En el cálculo contempla un adicional ya que es preferible que sobre y no que falte.
Para su evento le recomendamos realizar una adecuada degustación para una correcta elección, busque un buen champagne que se deslice en la boca acariciando el paladar, dejando a su paso recuerdos de frutas y frescura.
Observe el champagne, debe tener burbujas finas y persistentes, textura cremosa, buena acidez y largo recuerdo.